Pooooooobre Pita, sufro contigo, con tu desintoxicación... Cuando dejé de fumar, alguna vez desperté con el acto de estar poniéndome el cigarro en la boca, así como te vi despertar ayer tocando a los lados de tu cuerpo para buscar tu tete... que ya dejaste. (recién el lunes a los 3 años con casi 2 meses)
Y sólo me atrevo a contarlo porque
1. fue casi casi iniciativa propia, ayudada por tus papis cierto, y con mucha más fuerza por tú papá.
2. ya no sufro tanto cuando me lo pides en la noche dormida (ha sido poco y no estás desesperada)
3. La misses de la Emilia te lo pidieron para su bolsa de los chupetes (no eras la única, habían muchos más ahí, y de los compañeritos de tu hermana grande). Y hoy cuando lo volviste a ver en esa bolsita le dijiste chao como quien se despide de un amigo muy querido.
Prueba superada. Lloré un poco (tu papá es testigo), casi te lo pasé el primer día, pero preferí irme al gimnasio (ojos que no ven, corazón que no siente)y lo escribo y sufro...
Anécdota: la primera noche, te quejaste en la madrugada y tú bello papá te lo puso dos segundos para que no despertaras... después lo sacó y lo guardó. En la mañana despertaste pensando en que habías soñado que te ponías tu tete... Completamente engañada.
